viernes, 31 de mayo de 2013

Diseñando la estrategia de cambio profesional



Tal vez la consulta más usual que recibimos los consultores de Talento tiene que ver con la problemática común de cambio de carrera. El universo profesional está, desafortunadamente, lleno de ejecutivos insatisfechos con su trabajo, su actual rol, o con la organización en la que  trabajan.
Muchas son las causas de estés mal universal. La más frecuente y desafortunada por las consecuencias que conlleva, tiene que ver con desajustes vocacionales tempranos, que impulsaron al individuo a tomar el camino equivocado. Es sin duda la más costosa de corregir, porque conlleva en muchos casos, el tener que fortalecer competencias técnicas que toman tiempo ya que van relacionadas con las formación de la persona.
Otra común, tiene que ver con el tipo de líder al que le reporta el profesional. Los malos líderes son los causantes de la mayor cantidad de deserciones y pérdida  de talento del mundo profesional. Nada más frustrante que tenerle que reportar a personas de las que no se aprende, tienen malos hábitos gerenciales, o cuentan con un estilo de liderazgo que muchas veces está desajustado con la necesidad de crecimiento de sus subalternos. No siempre se  tiene la fortuna de reportar a un buen coach que tenga la habilidad y se preocupe genuinamente por aportar en el desarrollo de su gente.
Finalmente, y bajo riesgo de no profundizar en razones obvias como un mal nivel de compensación o problemas de tipo ético, debemos mencionar el tipo de cultura organizacional en la que se trabaja. La estructura de algunas organizaciones, la forma en como se toman las decisiones, el tipo de estrategia que asumen y las oportunidades de carrera y movilidad interna que ofrecen a sus empleados, muy frecuentemente contrastan con la visión y necesidades individuales. La frustración y el desgaste generado por la tensión en este ámbito es sin duda la tercera mayor causa en la toma de decisiones de cambio profesional.
Si bien la crisis económica mundial enfrió el mercado ejecutivo por un tiempo, y un cambio de carrera pudiera tomar más tiempo y esfuerzo que antes, vale la pena diseñar una estrategia:
-          Tómese tiempo para revisar su estructura profesional. Tómese más tiempo para identificar sus pasiones. Finalmente haga un ejercicio estructurado de alinear sus talentos y sus pasiones con el tipo de organización en donde estos tengan el espacio adecuado. No salga al mercado a dar palos de ciego sin tener previamente definido hacia donde quiere caminar. Un cambio de carrera demanda de su total enfoque y de la certeza de su parte de las habilidades con que usted cuenta para iniciar este camino.
-          Defina el tipo de organización y el área funcional en las que quiere trabajar. La mayor parte de los profesionales, sobre todo en países emergentes, no tuvo la oportunidad de escoger la organización en la que quería trabajar. Fue más al azar, unido a su red contactos inicial, la que terminó generando su primera oportunidad laboral. Un adecuado cambio de carrera implica que usted sea el cazador y no la presa. Haga un listado de las empresas que usted admira, identifique cuales son las características que le atraen, revise sus planes de negocio futuro y la industria a la que pertenecen,  analice su cultura, hable con sus empleados y construya una matriz de decisión que le ayude a perfilar finalmente la organización de sus sueños.
-          Vendase activamente. Los cambios de carrera implican un esfuerzo focalizado de venta de su perfil. Es un trabajo que demanda de toda su energía y creatividad. Mida los riesgos de hacerlo mientras usted está empleado. Una vez decidido active su estrategia. Identifique contactos internos dentro de las empresas y consiga una entrevista personal. Prepare un sólido portafolio de venta. Busque la forma de asesorarse en la presentación de su hoja de vida, de sus logros y competencias. Prepárese a fondo para la entrevista y esté seguro de conocer a fondo la organización y el porqué usted hace un buen ajuste con las necesidades de crecimiento de esta organización. La mayor parte de las empresas, sobre todo en etapas recesivas, hacen directamente su reclutamiento. Es imprescindible que usted aparezca en su radar.
-          Finalmente, trabaje de manera paralela su red de contactos. El famoso “networking”, sigue siendo responsable por la mayor parte del reclutamiento ejecutivo a nivel mundial. La mayor parte de las organizaciones apelan a su estructura interna y a su departamento de Recursos Humanos, antes de buscar proveedores externos que les ayuden con la búsqueda.


Una recomendación final que nunca sobra. Sea persistente. La preparación, el esfuerzo y la constancia terminan dando sus frutos. No desfallezca. El camino puede ser difícil pero en el mediano plazo el mercado premiará su persistencia. 

jueves, 30 de mayo de 2013

La importancia de entrar de primero

Un reciente estudio realizado por Uri Simonsohn y Francesca Gino de Wharton y Harvard Business School respectivamente, sustenta la hipótesis de los que ellos llaman "agrupamiento reductivo" (narrow bracketing). Después de haber estudiado los resultados de más de  10 años de admisiones para MBAs, econtraron que los entrevistadores, no importa su nivel de experiencia, tienden a perder objetividad en la calificación después de haber entrevistado a varios candidatos de similares características de forma seguida.

Su tesis, tal como lo explica Art Markman de Psychology Today, sostiene que los entrevistadores, tienden inconscientemente a balancer su día, y cuando un entrevistador ve 3 o 4 candidatos en línea, empiezan a preocuparse de estar dando muy altas calificaciones. Así, cuando entra un nuevo candidato, estadísticamente hablando este recibiría una menor calificación, simplemente como esquema mental de balancear su día y evitar estar dando resultados que sean uniformemente altos frente a candidatos similares.

Poniéndolo en otras palabras, los entrevistadores podrían estar sufriendo de "sesgo de información". Esta es la tendencia a favorecer la información que confirma las creencias o hipótesis propias. Como en materia del proceso de selección, la norma tiende a validar que, de varios candidatos entrevistados algunos no deberían cumplir con los estándares exigidos, el entrevistador tendería a aplicar esta "creencia", descalificando algunos, simplemente para ratificar su teoría o su propia experiencia.

La hipótesis de Simonsohn y Gino podría complementarse con los estudios realizados por la Universidad de Israel sobre la "fatiga en las decisiones". La Universidad le hizo seguimiento durante un año a mas de 1.100 decisiones de la corte, identificando que aquellos presos que llegaban temprano en la mañana, tenían una probabilidad del 70% de obtener libertad condicional, frente al 10% para aquellos juzgados en horas de la tarde. Parecería ser que nuestra energía para tomar decisiones no es una fuente inagotable, empujándonos a que en la tarde nuestras decisiones sean impulsivas.

Suficiente información para que como entrevistadores ajustemos nuestra agenda de la mañana como opción lógica para entrevistar varios candidatos (idealmente de procesos diferentes) y como candidatos presionar a ponerse de primeros en la agenda del entrevistador.



martes, 28 de mayo de 2013

Reclutando Pasión





Atípico sin duda. No es precisamente el tipo de assessment que estamos acostumbrados a hacer, pero en el fondo la metodología Heineken despierta una reflexión muy interesante frente a uno de los temas críticos de reclutamiento: El descubrimiento de la Pasión.

Uno de los grandes problemas del reclutamiento, sobre todo de talento joven, tiene que ver con la identificación de los elementos vocacionales del individuo, y su interés real por ejercer una función o crecer dentro de determinada cultura.Cuantos de nosotros tuvimos la fortuna de asumir desde jóvenes responsabilidades alineadas con lo que verdaderamente nos gustaba?,..pocos!. El camino fue tortuoso y no siempre exitoso. Todavía me encuentro en el mercado muchos ejecutivos maduros queriendo cambiar radicalmente de carrera en busca de su verdadera pasión. 

No es necesariamente su culpa. El mundo laboral, aquel que recluta directamente de las Universidades ofreciendo pasantías, no necesariamente apela a la identificación de la verdadera vocación por un oficio. El estudiante del otro lado, se enfrenta a la difícil realidad de tener que encontrar una pasantía, "cualquiera", dados las limitadas opciones que se ofrecen en el mercado, y termina frecuentemente haciendo algo que nunca se imaginó y seguramente algo que nunca soñó.

La pasión, cuando enmarca una visión de largo plazo, es de lejos, el ingrediente fundamental del éxito. Nadie termina siendo exitoso realizando tareas o asumiendo responsabilidades que no disfruta.

Desafortunadamente el proceso de validar una vocación, o identificar una verdadera pasión no esta bien estructurado.El mercado sigue" asumiendo" una gran cantidad de variables, casi todas ligadas con una determinada profesión, bajo la óptica de que todos aquellos que estudiaron una determinada carrera son aptos y disfrutaran oficios relacionados.!!Error craso!!

Existen herramientas sin duda, y podríamos partir de validar sus gustos, sus hobbies, aquellas materias que más disfrutaron, pero existe un alternativa: Pregunten!!. A todos finalmente, nos encanta hablar de nuestros sueños, de nuestras pasiones!.

lunes, 27 de mayo de 2013

Tendencias en Reclutamiento: TalentBin

Todos los días salen herramientas o aparecen negocios que cambian dramáticamente la forma en que el consumidor accede a cierto producto o servicio, a veces transformando incluso la dinámica de ciertas industrias, o forzando la desaparición de negocios antes exitosos. Que lo diga Bluckbuster, Kodak o Tower records, empresas hoy con flores encima de su tumba.
Algo similar nos sucede a nosotros como consumidores, que sin darnos cuenta, y gracias a nuestra capacidad de adaptación, asimilamos los nuevos productos casi de forma automática, pero rara vez asumimos una estrategia consciente de su uso. Somos altamente pasionales a la hora de comprar la novedad, generalmente sobre dimensionada a nuestras necesidades (sobre todo cuando de tecnología se trata), y poco racionales definiendo la forma y el cómo usar en nuestro provecho esta nueva herramienta.
En mi negocio, la novedad del día se llama TalentBin, creada más para servir a los reclutadores que a los candidatos, pero que sin duda y en el tiempo va a transformar la forma en cómo los “head hunters” accedemos a la información, encontramos un talento, y se lo presentamos a nuestro cliente, por lo menos en ciertas industrias.
TalentBin opera de manera diferente a LinkedIn, herramienta esta última ya popular en el mercado, y conocido en el mundo de los candidatos. La promesa de valor de TalentBin, es la de a través de su sistema en línea (no se cómo lo hacen pero al menos es lo que prometen),  tener la posibilidad de acceder al rastro, que un candidato potencial o talento va dejando durante su vida laboral en la web, y que lo hace diferente y más apto o calificado, para cierto tipo de trabajo.
TalentBin, promete no sólo ahorrarle al reclutador mucho tiempo en su velocidad de acceder al talento adecuado, sino que además asegura, lograr codificar de manera más eficiente, el tipo de destrezas de cada individuo, de forma tal que a la hora de su identificación se conozcan sus credenciales para un oficio.
Acaba de salir, por lo tanto, ni lo he usado, ni lo recomiendo. Lo que sí sé, es que el poder de la creatividad humana, hoy apalancada en la red, hace que los seres humanos, su talento, sus logros y también sus debilidades, vayan dejando ese famoso rastro del que habla TalentBin para ponerlo a disposición de quien quiera usarlo. Históricamente los reclutadores ejecutivos, éramos maestros en el arte de encontrar a quien no era visible para el resto del Universo (de alguna manera lo seguimos siendo). Hoy nuestra labor sin embargo, no es tanto saber encontrar ese alguien; es saber identificar si aquellos encontrados (por medios diversos como TalentBin), encajaran en la estrategia de la organización y sabrán aportar valor en un periodo determinado.

Así señores, que ojo con el rastro que dejan. Para bien o para mal, todo lo que hacemos, al menos en el mundo laboral, dejará huella. Preocupémonos por asegurarnos de que sea la que nos permita acceder a las oportunidades que nos hemos trazado. En esta era del “gran hermano”,  pareciera que nuestra vida entera estuviera siendo filmada desde lo alto, haciéndole pausa y rewind constante para verificar nuestras habilidades y también validar nuestros errores. Incomodo no. A mí por lo menos me parece así,.. pero real.

viernes, 24 de mayo de 2013

Reencontrando las Habilidades Perdidas



Para mi ha sido un gran descubrimiento, se llama Daniel Coyle, autor de "Talent Code", lectura que pasa a ocupar un lugar privilegiado en mi biblioteca de autores sobre Recursos Humanos, y que debería ser obligada también para quienes se inician como padres. Ya hubiera querido aplicar algunas de sus teorías en la educación de mis hijos, espero no haber metido la pata.

Coyle habla en su obra acerca de lo valioso de la repetición en la construcción de habilidades, y da valiosos ejemplos de cómo durante la infancia, a veces sin quererlo, y generalmente a través del juego, empezamos a construir algunas de las habilidades que nos permitirán enfrentarnos más tarde al mundo laboral.

Mas que la novedad de su teoría, sobre la que varios autores han escrito incansablemente, nos recuerda, y lo documenta estadísticamente, como la repetición de determinadas actividades, construyen en el cerebro circuitos adicionales (mielina), que se vuelven determinantes a la hora de fortalecer capacidades tanto intelectuales como físicas que se traducen luego en destrezas que nos hacen diferentes, mejores si se quiere, en variadas disciplinas.

Las recetas son infinitas en cuanto al tipo de actividad, pero la metodología siempre es la misma. La observación del maestro, la descomposición de la habilidad de éste en subprocesos de los que hay que generar consciencia, para finalmente desde la práctica lenta hasta la construcción de la maestría a través de la repetición, llegar a la perfección de una actividad cualquiera que esta sea.

Dos enseñanzas para el mundo del reclutamiento:
- Cuando se trata de contratar ejecutivos maduros, experimentados en una disciplina, la validación de la habilidad a través de la verificación de que el candidato lo haya realizado, muchas veces, es sin duda la mejor manera de garantizar estar atrayendo el talento adecuado,...es lo que llamamos experiencia no?.
- La segunda es que cuando se trata de contratar jóvenes "potenciales", es tan importante la validación de su predisposición al rápido aprendizaje a través de la identificación de su capacidad para obtenerlo, como la certeza de que se le incorporará a una cultura en donde la exposición a una practica repetida de un que hacer, le permitirá a éste construir una nueva habilidad. El líder (superior jerárquico) , se vuelve entonces fundamental. Aprendemos de la observación (ejemplo) de a quien/es reportamos, pero la maestría sólo se logra a través y únicamente  si los exponemos a que repitan, muchas veces, una determinada tarea.

Finalmente y en relación a quienes tienen bajo su responsabilidad la construcción de una cultura, es absolutamente clave ser conscientes, de que podemos tener estructuras lideradas por maestros en sus disciplinas, pero de nada nos sirve, frente a su futura sucesión, si no tenemos esquemas de acompañar y empoderar al mismo tiempo. Es la garantía, a veces a través del error, de ayudar en lo que Coyle llama el proceso de Mielinación Cultural.

Les recomiendo su lectura.



jueves, 23 de mayo de 2013

Por fuera de las credenciales Universitarias


Me importa un xxxx a que Universidad fuiste mientras seas talentoso”: Justin Kan, fundador  y Presidente de Justin.Tv
Kan simplemente alimentó recientemente una discusión que se ha vuelto candente en el mercado Norte Americano sobre el valor real de reclutar estudiantes talentosos de las llamadas Ivy league  (Mejores Universidades) vs el costo  y la garantía que esto implica.
 El tema, mirado hoy desde la perspectiva  del  estudiante y su familia es cada vez más complejo como quiera que 4 años en una Universidad Top cuesta alrededor de US$200.000 que se recuperaban relativamente rápido, pero que ahora con la economía en vacas flacas deja de ser una garantía. Sin embargo la perspectiva de Kan, no es la del estudiante sino la del empleador, y nutre una muy interesante discusión alrededor de las ventajas o desventajas de atraer este tipo de talento.
Kan, reconocido iconoclasta cuando de reclutamiento se trata, ha ido contracorriente en relación a los pergaminos académicos, atrayendo talento de muy diverso origen (incluso sin titulo Universitario)  siendo la “pasión”  y el “hambre” los  elementos en común de sus reclutados. Si bien ha aceptado recientemente, que usa esta estrategia  en etapas de emprendimiento primarias, y que ha empezado a mirar talento experimentado (no necesariamente de Universidades AAA), para delegar en ellos roles de procesos maduros, la nómina de Kan se nutre de talento de la más diversa índole.
En el país no nos escapamos a esta discusión. Aunque desafortunadamente nuestro sistema Universitario, incluso el Latino Americano, no se incluye en el ranking de las mejores 150 Universidades del Mundo, nuestro Ivy League local existe, así como el  paradigma en los reclutadores dentro del mundo corporativo, que demandan “idealmente” jóvenes de las mejores Universidades. Este paradigma se extiende a ejecutivos senior, y en muchos casos, incluso frente a carreras técnicas, se vuelve difícil convencer a nuestros clientes el entrevistar a ejecutivos con pregrados de Universidades consideradas “de media tabla”, lo que ha promovido sin duda el que muchos ejecutivos traten de adicionarle a sus curriculums diplomados o especializaciones de Universidades consideradas de primera línea, con la esperanza de ser mirados.
Si bien  coinciden los expertos de que las Ivy Leagues (incluidas las locales) ofrecen como su mejor activo una red de contactos más calificada, que abre oportunidades futuras; la realidad es que, sigue siendo la experiencia laboral, el carácter y el hambre por triunfar, unido a cualidades personales que no las pule necesariamente una Universidad Premium, los ingredientes que hacen de un talento, el adecuado para asegurar el éxito de la estrategia empresarial.
Al igual que Mr Kan, y sin demeritar el esfuerzo que implica entrar y subsistir en una gran Universidad, hay que mirar con cuidado. Pudiéramos estar dejando pasar a nuestro próximo Steve Jobs, desertor de Reed College, no precisamente una Ivy League.

Recursos Humanos: Delegar Reclutamiento a las unidades de negocio


La discusión no es nueva, pero se ha vuelto un tema complejo que sin duda afecta los indicadores de medición de reclutamiento hoy en cabeza de las áreas de recursos humanos. En USA, donde todo se mide, se habla del famoso ratio de 7:1, que mide en teoría una disponibilidad real de 7 personas por cada vacante laboral identificada en el mercado, y que debería estar empujando hacia abajo el indicador de velocidad de consecución de talento con una media internacional de 132 días  por vacante.

Sin embargo, La realidad es distinta. Hoy vemos un mercado local que sigue dejando números en rojo a la hora de medir  la efectividad con que las áreas de recursos humanos proveen el talento demandado por sus áreas de negocio. Las explicaciones son variadas, pero la problemática conlleva una discusión: ¿Deben ser las áreas de recursos humanos las encargadas de suplir talento a las áreas de negocio?

El tema empieza a aclararse en otras latitudes, y hay especialistas que atacan de fondo el  proceso de cómo se genera la vacante, cómo se delega en recursos humanos el proceso y cómo no siempre los resultados están alineados con la realidad del negocio.

Si bien la teoría de gestión moderna de talento dicta que el gestor debe ser una persona directamente involucrada con el negocio, la realidad es que la problemática que genera la vacante, está en si misma en el área funcional. Las vacantes se generan porque el negocio creció y demanda talento nuevo,  el área esta pobremente liderada y su gente rota mucho o  por una falta de planeación para reemplazar aquellos que por edad se ven obligados a dejar la organización.

En cualquiera de estas circunstancias, el proceso está  construido para que la unidad de negocio delegue de inmediato en recursos humanos el "problema" de conseguir, de inmediato, al nuevo “superman” del área. Sabemos por experiencia que este es el comienzo de una cadena de errores.

Recursos Humanos no siempre conoce la intimidad del negocio, la subcultura de liderazgo que se maneja en ella, o carece del poder "político" para metérsele al rancho al líder que deja irresponsablemente que su gente se vaya o la atraiga la competencia. Así mismo, carece de las herramientas idóneas, y las pocas que tiene son administradas por profesionales de muy poca experiencia. Los costos del especialista, son generalmente descartados por la unidad de negocio (no hay "presupuesto"), y por ende presionan bien sea la consecución de un proveedor de bajo costo (una mala apuesta para un problema mayor) o la utilización de bases de datos externas igual de complejas y rara vez una solución útil, esto cuando no se acude a la  medida más desesperada e inútil para atracción de alta gerencia,  poner un aviso de prensa.  

Somos muy exigentes organizacionalmente hablando, a la hora de definir procesos, exigir reportes,  conseguir recursos de capital, estar a tono con el estado de arte tecnológico o incluso subcontratar la estrategia. El talento sin embargo, lo dejamos ir por la puerta de atrás, con poca planeación para atraerlo y delegando la tarea en  departamentos de recursos humanos que, con la mejor buena voluntad, pero sin las herramientas adecuadas, están haciendo una trabajo precario generalmente desligado de la unidad de negocio que los tiene como "aliado estratégico" pero los trata como un proveedor de quinta. En materia de talento hoy, la mejor práctica es delegar hacia arriba, y ponerlo en el centro de la estrategia y las prioridades corporativas.

Acerca de CTPartners

CTPartners es una firma global, líder en la industria de búsqueda de ejecutivos de calidad con 30 años de experiencia y más de 400 empleados expertos en las áreas de servicios financieros, ciencias de vida, fabricación, servicios profesionales, Retail,  tecnología, medios de comunicación e industrias de telecomunicación.

Se encuentra ubicada a nivel mundial, sin embargo, la mayor parte está concentrada en Norte América, Europa, Asia del Pacífico  y Latinoamérica donde tiene presencia en Bogotá, Caracas, Lima, México, Panamá, Santiago y São Paulo. Para mayor información acerca de CTPartners, visite http://www.ctnet.com/